
Un ser humano puede plantar una semilla y marcharse,
hasta el punto de olvidarse de ella,
pero bajo la tierra y en secreto puede seguir viva latiendo,
y un día despertar con un poco de agua de lluvia,
y poco a poco ir creciendo…
A veces algo puede surgir debajo de la tierra,
algo que habíamos sembrado, que ya no recordabamos
y que luego nos sorprende ...
¿Quien sabe si mañana esa semillita se vuelva un árbol
que nos cobije del calor, y abrigue del frío,
nos dé frutos y oxígeno para vivir ?
Por lo que ...
algo pequeño e insignificante,
puede hacerse grande e imprescindible.
Shantal
1 comentario:
La grandeza de las cosas no dependen del tamaño físico que se posea sino de la inmensidad del espíritu de luz contenido en ellas.
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